Mis pasiones (plantas y caballos) unidas para aplicar en beneficio a los caballos.
Fue en el 2009, cuando mi vida hizo un giro hacia la conciencia y el respeto por la naturaleza, mientras aprendía el oficio de ganadera de caballos en el Pirineo. El amor por estos animales me viene desde la infancia y aprender a cuidarlos ha sido una de las experiencias más maravillosas de mi vida, llegando a formar parte de mí de manera relevante. Mientras estaba con los caballos aprendía a reconocer las plantas de la zona y estudiaba sus usos terapéuticos a lo largo de la historia, a través de los habitantes de la zona y de la que se convertiría en mi maestra herbolaria, Cristina Puig.
En el año 2010 empieza definitivamente mi historia con las plantas medicinales, incentivada por mi querida amiga Cristina, con quien aprendí todo lo que sé de plantas y como elaborarlas en forma medicinal. Con el proyecto @lesremeieres cuidábamos de nuestra familia, amig@s y de nuestro pequeño rebaño de animales diversos, en pleno contacto con la naturaleza y permitiéndonos sentir que nuestra evolución va unida al resto de los seres vivos y al medio dónde vivimos. Fueron las plantas las que me permitieron un recurso económico para sobrevivir y ser feliz con lo que hacía, comprendí que era libre gracias a ellas, pues tenía los recursos y conocimientos necesarios para curar a mis querid@s si necesidad de recurrir siempre a los fármacos sintéticos.
Mi modo de contribuir en la mejora de la salud equina, es comunicar las virtudes de las plantas medicinales a los humanos, para poder así aplicar plantas a herbívoros con seguridad y entender que en muchas ocasiones no es necesario recurrir a fármacos agresivos para sanarlos, pues claro que estos fármacos son imprescindibles en ciertos tratamientos y son medicinas complementarias.
Actualmente, ya somos muchos los que aplicamos doma natural, caballos en libertad, etología equina, barefoot, paddock más activo, etc. ¿Pero qué medicina aplicamos con ellos? Los herbívoros, animales que se alimentan de plantas, quienes mostraron a la humanidad a lo largo de la historia que plantas pueden matar, cuáles alimentar y también sanar. Vamos a recordar cómo cuidar de nuestros caballos como antaño, pero con los conocimientos de ahora, aplicando las plantas con formulaciones adaptadas a cada uno. Cada individuo es único y preparar un remedio personalizado, controlando el proceso y la calidad de los ingredientes es más efectivo que un remedio estandarizado.
Ya hemos entendido que no podemos ir con prisa cuando estamos con caballos, y lo mismo ocurre con las plantas, la fitoterapia aplicada merece conocimiento, constancia y tiempo para obtener el resultado respetuoso que merecen.
Judith Ramírez
@botanicament